Soñaba la niña con el arcoíris. Y su mamá con palabras.
«Érase una vez…», leía con voz dulce; la niña la miraba y en su mirada brillaba el eco de cada historia.
Cada tarde, cada noche, un cuento y silencio. Y la lluvia, siempre la lluvia calando el alma.
Hasta aquella tarde en que brilló el arcoíris y, al llegar a la última página, la niña pidió con voz argéntea:
«¿Me lo cuentas otra vez?»
Este {micro}cuento está dedicado a Nona y Naia, ¡enhorabuena, valientes!
Y además incluye unas de las ‘palabras favoritas‘ de Javi Martínez Manzano. ¿Te apuntas a este juego? ¿Y si solo tuvieras 50 palabras? En la fanpage propongo palabras (y su definición según la RAE), para inspirarte, generar ideas o para que me devuelvas una palabra afín, como hizo Javi.
En el Jardín Inglés 
Emociona!
Y más conociendo el cuento de Naia, del blog Con mi libreta de corazones.
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Cuando piensas que nunca dejará de llover y aparece el arcoíris 😉
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Muy agradecido por la mención y un micro-relato precioso 🙂 .
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Las lágrimas de emoción no me dejan ordenar mis palabras…… Solo alcanzó a deciros ¡què precioso microcuento!!, el corazón me bombea con fuerza, la piel de gallina, un nudo en el pecho, me estremezco…..jamás hubiese imaginado tanto, solo puedo daros las gracias. Gracias, gracias y mil veces gracias.
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Gracias a ti, Javi.
De hecho me diste la palabra exacta para otro microcuento… de terror 😉
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Gracias a ti, Nona. A veces llueve tanto, que las nubes no nos dejan ver el sol; menos mal que está el arcoíris para darnos esperanza.
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Me ha parecido muy bonito. ¡Precioso!
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¡Precioso! Y más conociendo la historia que hay detrás.
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