Esperan, una sobre otra.
Acarician el pelo y las mejillas.
Escriben cartas de amor y listas de la compra.
Planchan camisas y uniformes.
Cogen el bisturí y no les tiembla el pulso.
Se clavan en la roca para ascender otro metro.
Dibujan corazones en el aire.
Se alzan contra las injusticias.
Sostienen un libro.
Remiendan calcetines.
Tejen guantes y bufandas.
Sanan rodillas.
Juegan con trenes.
Tocan el piano.
Peinan coletas.
Lanzan bolas de nieve.
Detectan la fiebre.
Teclean informes.
Excavan en la tierra.
Aplauden.
Saludan.
Hacen cosquillas.
Preparan té.
Trazan planos.
Cargan cajas.
Descargan sacos.
Conducen.
Siembran.
Barren.
Cocinan.
Aman.
Este {micro}cuento está dedicado a todas las MUJERES. Sí, a ti, por todo lo que haces y se ve; y por todo lo que haces y no se ve.
Te propongo, durante esta semana, subir a tu blog {o a Facebook} una foto de tus manos. Y si eres hombre, también.
Precioso, gracias!
Algo así sólo lo puede escribir alguien que es mamá.
Saludos.
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Genial entrada. Me encanta
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O hija, hermana, traductora, ingeniera, abogada, doctora, bloguera, escritora, lectora, cocinera, limpiadora, conductora, fontanera, astrofísica, escaladora, futbolista, boxeadora, … ….
O todas en una 😉
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Preciosa entrada, ¡gracias! 😊
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Me ha gustado mucho! 🙂
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¡Hermoso! Feliz vida para todos aquellos que usan sus manos para construir y no para destruir. =)
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Como las tuyas 😉
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¡Qué tierna! Muchas gracias por tus palabras.
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Sin palabras!!!, qué bonito sientes!!
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Muy bonito escrito! Sin duda representa a muchas! Un saludo
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