El último mes del año se lo dedico a ellos, a los más pequeños, por la paciencia que tienen con los mayores. Porque se merecen ese ratito especial en el que soñar despiertos.
Si no sabéis qué regalar estas Navidades a los niños, regaladles TIEMPO.
Y guardad bien en vuestra memoria el recuerdo de sus miradas ilusionadas cuando les digáis:
‘¿Quieres que te lea un cuento?’