Quería

Quería ser estrella polar y solo fui fugaz.

Quería ser una gota de agua en la mar serena y fui lágrima amarga.

Quería ser el viento en tus alas y fui un leve suspiro.

Quería ser un bello jabeque para navegar contigo y fui pecio hundido en la sima.

Quería coser nuestras almas y apenas las hilvané.

Quería quererte y te perdí.

Quería, quería… ¡tantas cosas quería!

Y de tanto querer, me olvidé de mí.

12 comentarios en “Quería

  1. Vaya, a mí no me había parecido triste. Más bien, desencantada.

    Cuando deseas muchas cosas porque crees que así serás más feliz y te esfuerzas (y te sacrificas) por conseguirlas. Pero nunca es suficiente, la gente a tu alrededor exige más y más.

    Te vas enredando, un deseo te arrastra a otro, quieres complacer a todo el mundo y al final no eres feliz, ni puedes ver la realidad: que es a ti misma(o) a quien tienes que querer.

    Y ese es el primer paso.

    En realidad, el final del micro es el principio del camino.

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